Política
Más allá de su sonrisa

Una historia de mentiras y traiciones en Plottier: el detrás de escena de Malena Resa

Detrás de la gran sonrisa de Malena Resa, se esconde un pasado familiar relacionado con la dictadura militar, las mentiras y las traiciones.

Detrás de la gran sonrisa de Malena Resa, se esconde un pasado familiar relacionado con la dictadura militar, las mentiras y las traiciones.

La vida de Malena Resa transcurrió en Plottier, realizando sus estudios secundarios en el CPEM 8, siempre reunida con amigas de mejor estatus económico que el común de sus pares, de entornos más humildes.

Su madre fue maestra y directora de la escuela primaria número 60, su padre es contador y fue designado para ocupar la Secretaría de Hacienda de la Municipalidad de Plottier en 1973, siendo a su vez elegido por los militares como Intendente municipal durante el período de facto desde 1976 hasta 1983.

Ambos padres la acompañaron en sus estudios Universitarios, cursó en Buenos Aires la carrera de profesorado de inglés. Al retornar a la ciudad, desarrolló su trabajo en colegios privados como docente de inglés, y como docente universitaria en la carrera de Profesorado de Inglés.

Su carrera política se inició de la mano de Andrés Peressini, ex Intendente de Plottier, quien llevó adelante su idea de la Escuela Municipal de Idiomas, siendo un éxito en la localidad. Su desempeño laboral la llevó a ser considerada como tercera candidata a Concejal del partido SiemPre, cargo que asumió en diciembre del 2019.Al come

nzar su ejercicio, considerando que los votos eran propios, tomó independencia política olvidándose de sus orígenes y traicionando a su mentor, el actual diputado provincial Andrés Peressini, como también a sus antiguos compañeros.

El último año y medio tuvo un acercamiento a la intendente actual, Gloria Ruiz, estando presente en numerosos actos y acompañando su gestión de gobierno, rompiéndose dicho acercamiento en los últimos meses quedando a la deriva política.

En este momento, está finalizando la creación de un partido propio, con intenciones de ser candidata a Intendenta, con el objetivo principal de salvar el buen nombre y honor de su apellido “Resa”, que quedó tiznado y manchado, porque su padre representó a los Militares desde el año 1976 al 1983, como también por culpa de los negociados turbios realizados por su madre, es el caso de préstamos de nación que nunca canceló.

Su avaricia, codicia y necesidad de protagonismo le impiden trabajar en consenso con el resto de los concejales, quienes no la acompañan en ningún proyecto presentado, teniendo en dos años de mandato casi nula producción legislativa.

Además Malena Resa, siempre sonriente, buscando ser la carilinda y mujer simpática del concejo deliberante, coquetea con Rolando Figueroa, a quien acompañaría políticamente en su posible interna dentro del MPN o por fuera según la decisión del candidato a gobernador.

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