Los tiempos de crisis económica, de inflación desenfrenada, no son los más propicios para arriesgar el capital político que cada uno de los actores posee y allí residen las principales acciones y miedos que signan el momento democrático del país como de la región.

Queda claro que el balotaje puso a todos los partidos políticos en una efervescencia muy pero muy caliente.

En Juntos por el Cambio los dirigentes toman posición con apoyos a Milei o reclamos de neutralidad mientras que las tensiones conviven con las que ya había generado el acuerdo con Rolando Figueroa para las elecciones provinciales del 16 de abril.

Lo cierto es que en la próxima Legislatura no existirá un bloque con la alianza como tal, pues los diputados electos por el PRO y Nuevo Compromiso Neuquino formarán parte del nuevo oficialismo, mientras que el reelecto por la UCR tomará un camino separado. Si quedo claro esta semana que, hasta ahora, ninguno se pronunció a favor de Sergio Massa de Unión por la Patria.

Por otro lado, Pablo Cervi, el radical que permanecerá en su banca hasta el 2025, coincidió hasta ahora con la posición de la Unión Cívica Radical de asumir “neutralidad” frente al balotaje y prepararse para ser oposición y “contrapeso” frente al gobierno que toque.

El sector integrado por el PRO y Nuevo Compromiso Neuquino que acompañó la candidatura de Rolando Figueroa como lista colectora ganó cuatro bancas: las de Marcelo Bermúdez, Leticia Esteves, Damián Canuto y Mercedes Tulian, aunque todavía no se descarta algún pase al Ejecutivo.

Al igual que el gabinete que Figueroa el bloque de poder en la legislatura aún no está definido en cómo se organizarán las bancadas que responderán al nuevo oficialismo legislativo. Y seguro estaremos después de diciembre ante un duro escenario de reparto de las sillas en las comisiones permanentes que se hará una vez que los nuevos diputados hayan asumido.

Inició noviembre y se acelera el tiempo de descuento para ingresar a un nuevo periodo de gobierno. Se acomodan los espacios, pero también pareciera ser que se depura una parte de la dirigencia política del hecho judicial que se detono el uno de noviembre con la causa de la estafa con tarjetas sociales que va camino a convertirse en un caso que no solo comprometería a los ya imputados, sino que también salpicaría a referentes de distintos partidos políticos, organizaciones sociales, periodistas, empresarios y comerciantes.

Cuando nadie lo esperaba, la irrupción de Pablo Sánz, complica la retirada ordenada del actual gobierno provincial, pero además condiciona a la Justicia para que profundice la investigación en curso.

La investigación judicial ha salpicado a todos los partidos y se extiende como un incendio. En el caso del gobierno entrante de Figueroa puertas adentro abro una preocupación que genera la duda si quizás entre sus filas puede que existan algunos nombres que estén implicados en la lista que entrego el arrepentido de desarrollo social de la provincia, nadie desconoce que las huestes de Comunidad se conformaron con varios referentes del MPN.

Un MPN que desde la derrota que sufrieran en abril pasado en manos del actual diputado nacional, Rolando Figueroa, nada es igual en el vínculo entre el gobernador saliente, Omar Gutiérrez, con el ex mandatario provincial, Jorge Sapag; el vicegobernador, Marcos Koppmann; y el intendente capitalino, Mariano Gaido.

En lo que respecta a Rolando Figueroa seguramente aprovechará los próximos 20 días para definir gabinete de ministros y composición de nombres y colaboradores inmediatos sin dejar de mirar cómo se define la presidencia de los argentinos.

Por lo que se pudo saber el próximo gobierno provincial será mucho más austero en el número de ministerios que lo conformarán por lo que se presupone que la planta política será considerablemente inferior a la de la actual gestión. Si queda claro que por ahora se siguen dando señales inequívocas sobre el perfil de gestión que pretende para los próximos 8 años, porque si es cierto que Figueroa llego para quedarse.