Camila es descrita como una joven de tez blanca, ojos marrones y cabello negro. Su contextura delgada y estatura de 1.60 metros la hacen distinguible. En el momento de su desaparición, llevaba puesta una remera a rayas negras y blancas, jeans azules y borcegos negros. Preocupantemente, no tenía consigo su teléfono móvil, lo que ha dificultado los esfuerzos para localizarla.

La Unidad Fiscal de Delitos Contra las Personas está trabajando arduamente en el caso, y la búsqueda se ha intensificado desde el momento de la denuncia. A medida que avanzan las horas, la preocupación crece y las autoridades han hecho un llamado a la población para que aporte cualquier dato que pueda ayudar a encontrar a Camila.

Para Castellano y sus colaboradoras consideró que una rápida caída de la inflación en los próximos meses que mejore el poder adquisitivo y evite una apreciación del tipo de cambio real es clave para mantener la estabilidad del mercado de divisas y seguir acumulando reservas.